Todos los centros de infantil y primaria que tienen entre 12 y 17 unidades, es decir, los más frecuentes, pierden un puesto de trabajo según la citada orden. Eso supone que la reducción afecta a un 40% de los centros que imparten estas primeras etapas de la enseñanza obligatoria.
Los sindicatos reconocieron
que la anterior orden de plantilla, de 1997, estaba desfasada y había que
ponerla al día, pero con criterios pedagógicos, no con recortes de personal.
Aseguran que con estas reducciones será difícil aplicar el plurilingüismo y luchar contra el fracaso escolar. Además,
prevén que la supresión de maestros para el próximo curso no se quede en esos
400 docentes, sino que con el ajuste de la ratio y la reducción de unidades que
implicará el llamado “arreglo escolar”, que se abordará hoy junto a la orden de
plantillas en la mesa sectorial convocada para hoy, miércoles, la pérdida de
puestos docentes llegue al millar.
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